RESEÑA HISTORICA DE LA HACIENDA COCHAS PROPIEDAD DEL COMUN DE GUAÑEC
A solicitud de los caciques Don Fernando de Lloclla y Don Cristóbal Sacsa Ñaupa principales de San Cristóbal de Guañec, el 15 de Mayo de 1594 en el pueblo de Santísima Trinidad de Guancayo, provincia de Jauja, el Comendador Gabriel Solano de Figueroa Presbítero, Juez de Comisión y Visitador de Tierras en nombre de su Majestad, otorgó el título de AMPARO EN POSECION de los pastos, sitios, canchas, mojones y tierras que poseían el Común de Indios de San Cristobal de Guañec desde tiempos inmemoriales; entre estos pastizales, resaltan algunos fundos emblemáticos de la Comunidad Campesina Santísima Trinidad Huañec, como son TICLLACOCHA, PICHAGUAJRA, TUNSHO, PUMACOCHA etc.
El Excelentísimo Señor Conde de Lemos Virrey Gobernador y Capitán General en estos Reynos y Provincias del Perú, el 8 de Marzo de 1672 nuevamente otorgó AMPARO EN POSECION a petición de Juan Flores cacique y gobernador del pueblo de Guañec, Don Luís Sacza segundo en importancia, Don Tomás Alonso, Don Cristóbal Yauri y Don Juan de Hinojosa, principales del pueblo de San Cristóbal de Guañec.
En virtud de los títulos antes expuestos, Don Melchor de Carbajal Procurador de los naturales de este reyno en nombre del cacique Nicolás Flores y Común del pueblo de San Cristóbal de Guañec de la provincia de Yauyos y con aprobación del Supremo Gobierno del 8 de junio de 1717 otorgó la escritura de VENTA A CENSO PERPETUO a favor del Capitán Don Juan Martinez de la Escalera con obligación de pagar en cada un año ciento treinta pesos equivalente a ocho reales mediante testimonio del 8 de Marzo de 1716, en una de las cláusulas se establece clara y meridianamente que los naturales de Guañec pueden pastar sus ganados en los referidos pastizales siempre y cuando los animales sean propios.
Don Juan Martinez de la Escalera fundó la HACIENDA NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE COCHAS con ganado de Castilla que servían de garantía del fiel cumplimiento de su parte, posteriormente el conductor Don Juan Martinez deja en herencia a su albacea y heredero universal Don Francisco de Villanueva Zadua por no haber tenido hijos, ambos tienen problemas para controlar tan inmensas tierras, librándose varios procesos judiciales en coordinacion con el Común de San Cristóbal de Guañec en todas ellas con resultados favorables por los incuestionables documentos que los respaldan.
Don Francisco de Villanueva Zadua deja a su hijo Alberto de Villanueva Zadua quién conjuntamente con el Común de San Cristóbal de Huañec ganan el último DESLINDE a los pueblos de Guay Guay y Chacapalpa, con lo cual consolidan la propiedad el 20 de Noviembre de 1753 decretado por Don Antonio de Velasco Caballero de la Orden de Santiago Conde de Superunda del Consejo de su Majestad, Gentil Hombre de su Real Camara, Teniente General de sus Reales Ejercitos, Virrey Gobernador y Capitán General de estos Reynos y Provincias del Perú y Chile etc. y pueda ejercer su arrendamiento sin perturbaciónes ni molestias, lo cual fue ejecutado sin mayor problema por los títulos presentados y los argumentos esgrimidos, esto demuestra que nuestros antecesores de San Cristobal de Guañec han ejercido posición indiscutible en mutuo acuerdo con los arrendatarios.
Inicialmente el ingreso de los arrendamientos de ciento y treinta pesos anuales es pagado en efectivo y se destina para sostener vigilancia permanente en los dos tambos que Guañec tenía la resposabilidad de resguardar, aquellos tambos eran el Tambo de Pariacaca y el Tambo de Julca, Guañec a través de sus ayllus próximos ponía seis hombres permanentes en cada tambo y con el restante pagaban los tributos de los indios guañinos a la corona española, en los mencionados tambos, Guañec tenía sus colpas donde almacenaban sus alimentos, por esta razón también era denominado como Repartimiento de Colpas y Chungasmarca, Colpa viene de "Qullpa" que para el huañino de entonces significaba lugar salado donde almacenan los alimentos, ejemplo el "charqui" y Chungasmarca es una palabra quechua compuesta, donde "chunga" significa diez y "marca" significa pueblo, en síntesis diez pueblos.
Posteriormente este importe de los ciento y treinta pesos, el arrendatario deposita en la Caja General de Censos y Bienestar de Comunidades de Indios, de donde cobra el primer maestro preceptor de la escuela de Guañec Don Esteban Holgado quién realizó un excelente trabajo de enseñanza de las primeras letras y los huañinos estuvieron muy contentos y satisfechos con su desempeño, lamentablemente desistió y el segundo maestro preceptor quién también merece ser mencionado fue Don Matheo Duran, también cobra sus honorarios de este dinero de la Caja de Censos y Bienestar de Comunidades de Indios.
Más adelante el Dr. Manuel Vega Bazán cura del pueblo de Guañec, en representación de indigenas de San Cristóbal de Guañec, pide que este dinero del arrendamiento de la Hacienda de Cochas sea utilizado para pagar los derechos de misas, gastos de aceite y cera de la iglesia del pueblo, basicamente para solventar el aeite que se utiliza en la luz permanente del sagrario donde se guarda el cuerpo de Jesucristo en la Iglesia de Guañec y debe estar iluminado las 24 horas de los 365 días de todos los años, después este costo es saldado por la Municipalidad de Huañec que paga en compensación por el arriendo del estadio que pertenece a la parroquia.
Don Juan Martinez de la Escalera fundó la HACIENDA NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE COCHAS con ganado de Castilla que servían de garantía del fiel cumplimiento de su parte, posteriormente el conductor Don Juan Martinez deja en herencia a su albacea y heredero universal Don Francisco de Villanueva Zadua por no haber tenido hijos, ambos tienen problemas para controlar tan inmensas tierras, librándose varios procesos judiciales en coordinacion con el Común de San Cristóbal de Guañec en todas ellas con resultados favorables por los incuestionables documentos que los respaldan.
Don Francisco de Villanueva Zadua deja a su hijo Alberto de Villanueva Zadua quién conjuntamente con el Común de San Cristóbal de Huañec ganan el último DESLINDE a los pueblos de Guay Guay y Chacapalpa, con lo cual consolidan la propiedad el 20 de Noviembre de 1753 decretado por Don Antonio de Velasco Caballero de la Orden de Santiago Conde de Superunda del Consejo de su Majestad, Gentil Hombre de su Real Camara, Teniente General de sus Reales Ejercitos, Virrey Gobernador y Capitán General de estos Reynos y Provincias del Perú y Chile etc. y pueda ejercer su arrendamiento sin perturbaciónes ni molestias, lo cual fue ejecutado sin mayor problema por los títulos presentados y los argumentos esgrimidos, esto demuestra que nuestros antecesores de San Cristobal de Guañec han ejercido posición indiscutible en mutuo acuerdo con los arrendatarios.
Inicialmente el ingreso de los arrendamientos de ciento y treinta pesos anuales es pagado en efectivo y se destina para sostener vigilancia permanente en los dos tambos que Guañec tenía la resposabilidad de resguardar, aquellos tambos eran el Tambo de Pariacaca y el Tambo de Julca, Guañec a través de sus ayllus próximos ponía seis hombres permanentes en cada tambo y con el restante pagaban los tributos de los indios guañinos a la corona española, en los mencionados tambos, Guañec tenía sus colpas donde almacenaban sus alimentos, por esta razón también era denominado como Repartimiento de Colpas y Chungasmarca, Colpa viene de "Qullpa" que para el huañino de entonces significaba lugar salado donde almacenan los alimentos, ejemplo el "charqui" y Chungasmarca es una palabra quechua compuesta, donde "chunga" significa diez y "marca" significa pueblo, en síntesis diez pueblos.
Posteriormente este importe de los ciento y treinta pesos, el arrendatario deposita en la Caja General de Censos y Bienestar de Comunidades de Indios, de donde cobra el primer maestro preceptor de la escuela de Guañec Don Esteban Holgado quién realizó un excelente trabajo de enseñanza de las primeras letras y los huañinos estuvieron muy contentos y satisfechos con su desempeño, lamentablemente desistió y el segundo maestro preceptor quién también merece ser mencionado fue Don Matheo Duran, también cobra sus honorarios de este dinero de la Caja de Censos y Bienestar de Comunidades de Indios.
Más adelante el Dr. Manuel Vega Bazán cura del pueblo de Guañec, en representación de indigenas de San Cristóbal de Guañec, pide que este dinero del arrendamiento de la Hacienda de Cochas sea utilizado para pagar los derechos de misas, gastos de aceite y cera de la iglesia del pueblo, basicamente para solventar el aeite que se utiliza en la luz permanente del sagrario donde se guarda el cuerpo de Jesucristo en la Iglesia de Guañec y debe estar iluminado las 24 horas de los 365 días de todos los años, después este costo es saldado por la Municipalidad de Huañec que paga en compensación por el arriendo del estadio que pertenece a la parroquia.
El general Don Alberto de Villanueva Zadua y hermanos traspasan la conducción de las tierras a Don Gerónimo de Angulo del Orden de Santiago Conde de San Isidro, en este periodo sucedió la independencia del Perú, causando desorden y caos lejos de favorecer a los naturales surgió el gamonalismo y el abuso de los terratenientes que traspasaron la conducción de la Hacienda Cochas a la empresa minera norteamericana la CERRO DE PASCO COPPER CORPORATION.
En el año 1964 la COMUNIDAD CAMPESINA SANTISIMA TRINIDAD DE HUAÑEC, en magna asamblea y por unanimidad acordaron reivindicar sus tierras, nombrando como delegados a los Srs. Teobaldo Cayetano Morales y Marcos Barrera Cayetano.
El 4 de Abril de 1964, en asamblea general del pueblo con participación de los delegados de las dos comunidades, Director de la Escuela y residentes de Lima, constituyen el Frente Unico de San Cristobal de Huañec, con la idea de reforzar la petición, orientados a reinvindicar la Hacienda Cochas.
Los delegados hicierón traducir el título con el paleógrafo Dr. Raul Rivera Serna de la Biblioteca Nacional.
El 2 de Noviembre de 1964, los integrantes del frente los Srs. Teobaldo Cayetano Morales, Modesto Reyes Durand y Luis Jimenez Ysla se constituyeron en la Empresa Cerro de Pasco Copper Corporation en La Oroya a efectos de plantear la reivindicación de nuestras tierras, entrevistándose con los señores abogado del Departamento Legal y con el Gerente de Operaciones de la compañía norteamericana, teniendo como respuesta que no tenían facultades suficientes para resolver este problema y los huañinos exigieron una respuesta por escrito, comprometiéndose alcazar posteriormente.
El 15 de Junio de 1965, la Empresa entrega la respuesta por escrito y se somete a la asamblea general de la Comunidad Santísima Trinidad de Huañec, quienes acuerdan reforzar el frente incorporando a Quinches, Tanta, Cochas y San Joaquín, elaboran un memorial contundente dirigido al Presidente de la República Arquitecto Fernando Belaunde Terry, quién toma cartas en el asunto y deriva al Ministerio de Comunidades, donde se constituye la Junta de Conciliación entre las comunidades y la compañía, la empresa impugna esta Junta de Conciliación y pide que pase al Poder Judicial, insisten en que administrativamente no tienen facultades suficientes para tomar decisiones al respecto.
El 15 de Junio de 1968 el Ministerio mediante Resolución Divisional Nº 199 inhibe el expediente Nº 327, dejando expedito a las comunidades para hacer valer sus derechos.
Lamentablemente el 3 de Octubre de 1968, ocurre el golpe de estado en el Perú, el presidente Arquitecto Fernando Belaude Terry es derrocado y entra como presidente el General de División Juan Velasco Alvarado, Jefe del Comando Conjunto de las fuerzas Armadas, cuyo gobierno de facto expropia la Cerro de Pasco Copper Corporation y crea CENTROMIN PERU a la cual entregan las minas de la Cerro y a través de la desdichada Reforma Agraria crea la Sociedad Agraria de Interés Social (SAIS), entre ellas la SAIS TUPAC AMARU, a quiénes el 30 de Marzo de 1970, les adjudica nuestra propiedad, creyendo el gobierno que se trataba de una propiedad de la empresa norteamericana Cerro de Pasco Copper Corporation; el Estado pagó con bonos a los propietarios de las haciendas expropiadas, sin embargo muy pocos cobraron, entre los que cobraron está por ejemplo Don Dionicio Romero quién montó una fábrica textil con capital proveniente de los bonos y entre los que no cobraron está el Común de Guañec, actualmente el Congreso de la República tiene pendiente este tema para actualizar la valorización de estos bonos porque la Corte Suprema y el Tribunal Constitucional ya fallaron a favor de los propietarios y bonistas, en consecuencia los bonos tienen que pagarse, lo que está en discución es la cantidad, debido al tiempo transcurrido, hubo una hiperinflación y también se cambió de unidad monetaria, pero esta valorización es relativamente sencilla, el problema está en la reglamentación, por la diversidad de casos, hay propietarios que no tienen bonos, otros han extraviado los bonos y algunos tienen los bonos deteriorados, lo que queda claro que el Estado Peruano de ninguna manera puede ser PERROMUERTERO.
La Hacienda Cochas es considerada como una de las zonas más bellas de la Sierra del Perú, en virtud de esa extrema hermosura ecológica, el 3 de Junio del 2001 mediante Decreto Nº 033-2001-AG fue categorizada como la primera RESERVA PAISAJISTA NACIONAL, denominándose RESERVA PAISAJISTA NOR YAUYOS COCHAS, en el cual están incluidos los fundos que rodean las lagunas Ticllacocha, Pucacocha, Sucococha y el majestuoso Pichaguajra que son propiedades de la Comunidad Santísima Trinidad de Huañec mediante título de propiedad inscrito en los Registros Públicos el 7 de Junio de 1930 con el Nº 1233.
La Hacienda Cochas como reserva paisajista contribuye a la conservación de la biodiversidad y del medio ambiente. Por tanto; es área protegida con abundante potencial ecológico, turístico y productivo, está inmensidad de territorio nos legó como herencia el gran APO SACSA (APU SHACSHA), quién heredó de los antepasados desde tiempos inmemoriales.
Hoy 17 de Enero, fecha de nuestro aniversario, con este modesto trabajo, rendimos homenaje postumo a Don Teobaldo Cayetano Morales, autodidacta, con magníficas cualidades para la oratoria, conmovedor y convencedor por excelencia, gracias a esta virtud logró mantener la integridad y unidad del pueblo de Huañec y por haber sido el gran líder defensor de las propiedades de nuestra comunidad, hay un dicho muy huañino, que dice: "No hay Cayetano malo", uno de sus más importantes logros es la fundación de la Granja Comunal.
El 4 de Abril de 1964, en asamblea general del pueblo con participación de los delegados de las dos comunidades, Director de la Escuela y residentes de Lima, constituyen el Frente Unico de San Cristobal de Huañec, con la idea de reforzar la petición, orientados a reinvindicar la Hacienda Cochas.
Los delegados hicierón traducir el título con el paleógrafo Dr. Raul Rivera Serna de la Biblioteca Nacional.
El 2 de Noviembre de 1964, los integrantes del frente los Srs. Teobaldo Cayetano Morales, Modesto Reyes Durand y Luis Jimenez Ysla se constituyeron en la Empresa Cerro de Pasco Copper Corporation en La Oroya a efectos de plantear la reivindicación de nuestras tierras, entrevistándose con los señores abogado del Departamento Legal y con el Gerente de Operaciones de la compañía norteamericana, teniendo como respuesta que no tenían facultades suficientes para resolver este problema y los huañinos exigieron una respuesta por escrito, comprometiéndose alcazar posteriormente.
El 15 de Junio de 1965, la Empresa entrega la respuesta por escrito y se somete a la asamblea general de la Comunidad Santísima Trinidad de Huañec, quienes acuerdan reforzar el frente incorporando a Quinches, Tanta, Cochas y San Joaquín, elaboran un memorial contundente dirigido al Presidente de la República Arquitecto Fernando Belaunde Terry, quién toma cartas en el asunto y deriva al Ministerio de Comunidades, donde se constituye la Junta de Conciliación entre las comunidades y la compañía, la empresa impugna esta Junta de Conciliación y pide que pase al Poder Judicial, insisten en que administrativamente no tienen facultades suficientes para tomar decisiones al respecto.
El 15 de Junio de 1968 el Ministerio mediante Resolución Divisional Nº 199 inhibe el expediente Nº 327, dejando expedito a las comunidades para hacer valer sus derechos.
Lamentablemente el 3 de Octubre de 1968, ocurre el golpe de estado en el Perú, el presidente Arquitecto Fernando Belaude Terry es derrocado y entra como presidente el General de División Juan Velasco Alvarado, Jefe del Comando Conjunto de las fuerzas Armadas, cuyo gobierno de facto expropia la Cerro de Pasco Copper Corporation y crea CENTROMIN PERU a la cual entregan las minas de la Cerro y a través de la desdichada Reforma Agraria crea la Sociedad Agraria de Interés Social (SAIS), entre ellas la SAIS TUPAC AMARU, a quiénes el 30 de Marzo de 1970, les adjudica nuestra propiedad, creyendo el gobierno que se trataba de una propiedad de la empresa norteamericana Cerro de Pasco Copper Corporation; el Estado pagó con bonos a los propietarios de las haciendas expropiadas, sin embargo muy pocos cobraron, entre los que cobraron está por ejemplo Don Dionicio Romero quién montó una fábrica textil con capital proveniente de los bonos y entre los que no cobraron está el Común de Guañec, actualmente el Congreso de la República tiene pendiente este tema para actualizar la valorización de estos bonos porque la Corte Suprema y el Tribunal Constitucional ya fallaron a favor de los propietarios y bonistas, en consecuencia los bonos tienen que pagarse, lo que está en discución es la cantidad, debido al tiempo transcurrido, hubo una hiperinflación y también se cambió de unidad monetaria, pero esta valorización es relativamente sencilla, el problema está en la reglamentación, por la diversidad de casos, hay propietarios que no tienen bonos, otros han extraviado los bonos y algunos tienen los bonos deteriorados, lo que queda claro que el Estado Peruano de ninguna manera puede ser PERROMUERTERO.
La Hacienda Cochas es considerada como una de las zonas más bellas de la Sierra del Perú, en virtud de esa extrema hermosura ecológica, el 3 de Junio del 2001 mediante Decreto Nº 033-2001-AG fue categorizada como la primera RESERVA PAISAJISTA NACIONAL, denominándose RESERVA PAISAJISTA NOR YAUYOS COCHAS, en el cual están incluidos los fundos que rodean las lagunas Ticllacocha, Pucacocha, Sucococha y el majestuoso Pichaguajra que son propiedades de la Comunidad Santísima Trinidad de Huañec mediante título de propiedad inscrito en los Registros Públicos el 7 de Junio de 1930 con el Nº 1233.
La Hacienda Cochas como reserva paisajista contribuye a la conservación de la biodiversidad y del medio ambiente. Por tanto; es área protegida con abundante potencial ecológico, turístico y productivo, está inmensidad de territorio nos legó como herencia el gran APO SACSA (APU SHACSHA), quién heredó de los antepasados desde tiempos inmemoriales.
Hoy 17 de Enero, fecha de nuestro aniversario, con este modesto trabajo, rendimos homenaje postumo a Don Teobaldo Cayetano Morales, autodidacta, con magníficas cualidades para la oratoria, conmovedor y convencedor por excelencia, gracias a esta virtud logró mantener la integridad y unidad del pueblo de Huañec y por haber sido el gran líder defensor de las propiedades de nuestra comunidad, hay un dicho muy huañino, que dice: "No hay Cayetano malo", uno de sus más importantes logros es la fundación de la Granja Comunal.
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